Crítica - Hombres de Negro 3

El peligroso extraterrestre, Boris el animal (Jemaine Clement) se ha escapado de la prisión lunar en la que la organización de los Hombres de Negro lo habían recluido, veinte años antes. La misión de su fuga es simple: asesinar a su captor, el agente K (Tommy Lee Jones) y para ello inventa un elaborado plan en el que regresará en el tiempo, evitando así, su captura y la extinción de su especie. Sin embargo, el agente J (Will Smith) se dará cuenta de la ejecución del plan y viajará al Nueva York de la década de los sesentas para salvar a su compañero, contando con la propia ayuda del joven agente K (Josh Brolin).

Diez años después de ver a Lara Flynn Boyle como un extraterrestre que toma el cuerpo de una súper modelo de ropa interior y a Johnny Knoxville con dos cabezas en ese desastre de secuela estrenada en el 2002, llega la tercera parte de la saga de Hombres de Negro, en donde el director, Barry Sonnenfeld (Get Shorty, 1995) retoma el humor y la estética de la primera película otorgando un producto que vale mucho la pena.

El primer punto a recalcar es el guión de Etan Cohen (Tropic Thunder, 2008) quien otorga gags divertidos, personajes entrañables y una historia que conforme va avanzando la película, se va desviando de las expectativas y superandose. El salto a la década de los sesentas, los chistes políticos, sociales y culturales meros de la época son bien llevados y ejecutados. Sin embargo, por momentos se vuelve confuso, repetitivo y lleno de incoherencias.

Will Smith, quien se queda en su zona de confort entrando en los zapatos de J y Tommy Lee Jones, que ya nota los años que han pasado por el, interactúan en pocas ocasiones en el filme, manteniendo el espíritu de la pareja complicada y con poca comunicación y la química de los personajes, que en las dos cintas anteriores se había establecido.

Josh Brolin, en su papel del agente K en su juventud, es quien se termina robando la película  logrando capturar, casi a la perfección los gestos, ademanes e incluso el tono sureño de voz que Lee Jones le había inculcado a su personaje a lo largo de dos cintas, anotandose una posible nominación al Globo de Oro como Mejor Actor de Reparto por este papel.

Las faldas, los peinados, los trajes de dos piezas, la escencia de la década de los 60's y la era espacial es capturado de manera sobresaliente en el filme gracias al trabajo de Bo Welch (Thor, 2011) en el diseño de producción, Kasra Farahani (The Curious Case of Benjamin Button, 2008) y Luke Freeborn (Inception, 2010) en la dirección de arte, Susan Bode (Julie & Julia, 2009) en el diseño de Set y Mary E. Vogt (Batman Returns, 1992) en el diseño de vestuario.

Los efectos CGI son, en escenas específica,s necesarios pero exagerados en otras, olvidando por completo al trabajo material que la primera película había hecho relucir tanto.

Hombres de Negro III (Men in Black III, 2012) podría contarse como una película sin mayores pretensiones que entretener y que cumple con su cometido. No se sorprendan si las lágrimas salen en dos o tres ocasiones, especialmente rumbo al final, con una vuelta de tuerca que nos hará pedir más Hombres de Negro.

***

Men in Black III

Estados Unidos, 2012
Dirigida por Barry Sonnenfeld

con Will Smith, Tommy Lee Jones y Josh Brolin

Duración: 105 minutos

Distribuye: Sony Pictures México